Cante jondo de altura en la 35 Miga Flamenca de Bedmar donde estarán la raza de Marina Heredia y el empuje de Rancapino Chico
El cartel, que se desarrollará el viernes 22 de este mes septiembre en el marco de las fiestas patronales, se completa conla cantaora Anbel Valencia y el cordobés Antonio Haya, El Jaro.
Será una de las pocas ocasiones que tendrán los aficionados de la comarca de Mágina y de la provincia de poder escuchar sobre el mismo escenario a dos figuras que hoy se sitúan en la primera línea del flamenco en nuestro país: Marina Heredia y Rancapino Chico. Así lo han resaltado esta mañana en la presentación del cartel de la 35 Miga Flamenca el alcalde de Bedmar-Garciez, Enrique Fresno, la diputada de Cultura, África Colomo, y la presidenta de la Peña Flamenca La Serrezuela de Bedmar.
La 35 Miga Flamenca que organiza el Ayuntamiento con el apoyo de la Diputación provincial y la colaboración de la Peña Flamenca La Serrezuela de Bedmar, tenía difícil subir el listón de 2022 (el año pasado fueron Estrella Morente e Israel), pero pese a todo este año se mantiene en todo lo alto el interés de la afición por una velada que se desarrollará el viernes, 22 de este mes, en la Caseta Municipal de Bedmar, en el marco de las Fiestas Patronales en honor a la Virgen de Cuadros que se celebran del 22 al 27 de este mes.
El alcalde de Bedmar-Garciez, Enrique Carreras ha señalado que “hoy presentamos un cartel con el que el Ayuntamiento bedmareño sigue manteniendo en todo lo alto el nivel del festival de nuestro pueblo entre los mejores de la provincia. Si ya era difícil superar el espectáculo del año pasado tras la pandemia, donde tuvimos a Estrella Morente e Israel, sí podemos decir que la Miga bedmareña de este año continúa su línea ascendente de la última década, acercando a los aficionados bedmareños y toda la provincia en cante jondo que se hace en nuestro país”.
Y es que abrirá el cartel la granaína Marina Heredia, una cantaora que empezó a cantar muy joven y que lleva el flamenco en su ADN, un esfuerzo y una dedicación que se vieron reconocidos en 2004 al recibir el Premio ‘Andalucía Joven a las Artes’ por ser un ejemplo de trabajo y talento y contribuir a la difusión del flamenco y de Andalucía en el mundo.
A partir del año 2000, la trayectoria de Marina no ha parado de ascender, llamándola a los principales escenarios, desde el teatro de la Maestranza de Sevilla, el Albéniz de Madrid, o el Gran Teatro de Córdoba al Palau de la Música de Valencia o el prestigioso Palacio de la Música de Estrasburgo y el Palacio de Cristal de Oporto.
Por su parte, Rancapino Chico, Alonso Nuñez Fernandez (Chiclana de la Frontera, Cádiz, 1988), es hijo del gran cantaor Alonso Nuñez “Rancapino” y de Juana Fernandez Núñez. Rancapino Chicod debutó en el Gran Teatro Falla, donde participó al lado de figuras de la talla de Chano Lobato, Juan Villar, Rancapino, etc., Con 10 años colaboró en el disco homenaje de Juan Habichuela, “Del Campo al Príncipe”, donde intervino al lado de Enrique Morente, Estrella Morente, Miguel Poveda, Rancapino, y la familia de Juan Habichuela. Con 22 años ganó el concurso de la peña flamenca de Chiclana de la Frontera, cantando por los palos de martinetes, fandangos y bulerías.
El joven cantaor está haciéndose un hueco más que merecido en el panorama del flamenco andaluz y nacional y está considerado como gran promesa dentro del Flamenco puro y heredero de los cantes de Cádiz.
Anabel Valencia (Lebrija, Sevilla), nace en el seno de una familia cantaora por excelencia, los Valencia. Desde muy joven despunta entre los cantaores de su generación, y a los 17 años graba su primer disco como vocalista del grupo “De ojana ná” llegando a los primeros puestos en las listas de éxitos nacionales. Su debut como cantaora en solitario es en la Caracolá Lebrijana 2008 y se consagra en la Bienal de Flamenco de Sevilla en el año 2014 dentro del espectáculo "Cantaoras. Lo puro manda", volviendo a este escenario en el año 2018. Desde entonces no ha parado de realizar actuaciones como gran figura del cante, una auténtica cantaora de raza, elegancia y flamencura.
Cierra el cartel de la 35 Miga de Bedmar Antonio Haya El Jaro nació en Villa del Río (Córdoba) en 1975. A los 10 años, se inicia en el mundo del cante flamenco de la mano de su paisano Paco González. A pesar de su juventud, sus buenas facultades y el afán de superación le han reportado numerosos premios en diferentes concursos de cante flamenco, ha participado en numerosos Festivales y sus actuaciones en Peñas Flamencas son numerosas.
Ha compartido cartel con primeras figuras del cante como, Antonio Núñez "El Chocolate", José Menese, Terremoto, Luis de Córdoba, El Cabrero, entre muchos otros. Aunque en su repertorio maneja gran cantidad de estilos, el cante en el que más transmite es la siguiriya, la soleá, la malagueña, las tarantas, las alegrías, etc.
La Miga
Desde que se puso en marcha en septiembre de 1987 por parte del Ayuntamiento, la Miga se ha convertido en uno de los festivales más veteranos de la provincia junto al de Pegalajar, Jódar y Mancha Real. Por este festival han pasado más de un centenar de cantaores de primera línea del panorama nacional, entre los que podemos citar a El Cabrero, Arcángel, Argentina, Rocío Márquez, Antonio Reyes, El Perro de Paterna, Pedro el Granaíno, Miguel de Tena, Jiménez Rejano, José Galán, Chano Lobato, Curro de Utrera, El Polaco, José de la Tomasa, Calixto Sánchez, Gabriel Moreno, Curro Malena, Raúl Montesinos, Kiki de Castinblanco o Julián Estrada, junto a cantaores de la provincia jienense como Charo López, Gema Jiménez, Fina de Ángeles o Carlos Cruz.