Las obras en la carretera de Bedmar a Cuadros se reanudarán a mediados de agosto tras ceder el contrato la UTE constructora
El proceso es ‘totalmente ajeno’ ajeno a la Diputación, que es la titular de esta carretera y la promotora de las reforma, según el diputado de Infraestructuras José Castro.
La reciente paralización de las obras en la carretera provincial JV-3222, de Bedmar a Cuadros, cuya titularidad es de la Diputación jienense, se debe a “motivos ajenos totalmente a la entidad provincial”, según ha declarado este lunes a NOTICIASDEJAEN el diputado de Infraestructuras José Castro, quien ha asegurado también que los problemas surgidos están en vías de solución y las obras se retomarán “en un par de semana, el próximo mes de agosto con los mismos plázos y los mismos parámetros de calidad con los que fue adjudicada inicialmente la obra”.
Pese a que la promotora de la obra y la titular de estos 4 kilómetros de carretera es la Diputación jienense, la cuestión que ha llevado a esta situación de parada en las obras es “ajena a Diputación” y está dentro de la legalidad en todo el proceso de contratación con la Administración pública, según ha manifestado Castro.
La UTE temporal que se creó para acceder a esta obra entre las empresas Áridos Mengíbar y Pavimentos Morales, cuyo presupuesto final es de 2,8 millones de euros, han planteado a la Diputación provincial la posibilidad de poder ceder este contrato a otra empresa o unión de empresas, cuestión que es factible en estos procesos de trabajo con administraciones públicas al haber superado ya el 20% de la certificación de la referida obra. Esta cesión de contrato se hace con las mismas características de calidades, monto económico y plazos de ejecución que tenía la UTE inicial.
Según Castro, la nueva empresa a la que se cederá el contrato por parte de la UTE inicial está ya localizada y en breves fechas, una vez terminados los trámites oficiales, se reiniciarán las obras en esta vía. Castro ha mostrado su confianza en que se puedan cumplir los plazos de ejecución, pese a los retrasos que supuso la propia situación de pandemia sanitaria en marzo y la parada actual de las obras, que “podrían conllevar algún retraso”.