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El turismo de incienso y procesiones pondrá el cartel de completo en los alojamientos de muchas zonas de Jaén

La media de ocupación hotelera prevista rondará a nivel de toda la provincia el 65%, aunque el Parque Natural de Cazorla y las ciudades de Úbeda y Baeza estarán al cien por cien y el Parque de Sierra Mágina en un 80%.

En medio del buen tiempo previsto para los próximos días, se prevé que la afluencia de visitantes y de ocupación hotelera en los establecimientos jienenses supere en varios puntos a la del año pasado. No en balde, para muchas de las zonas de la provincia estamos en temporada alta, siendo la mejor fecha para los negocios del sector, por encima de los meses estivales. Para la primera fase de la Semana Santa, la que va desde este viernes de Dolores hasta el martes, las previsiones de ocupación en la provincia se sitúan en el 58%, mientras que en la segunda fase, del miércoles al domingo 16 son de un 82 %.

Con esas previsiones, la estimación de la ocupación media para el conjunto de la provincia rondarán el 60%, hechas las salvedades de lo que viene ocurriendo en el eje renacentista integrado por de las Ciudades Patrimonio de la Humanidad  de Úbeda y Baeza y en el Parque Natural de Cazorla, Segura y Las villas, donde se registrarán picos del cien por cien de ocupación, especialmente en las segunda fase de la Semana Santa, de Jueves Santo a Domingo de Resurrección. Otro tanto ocurrirá en zonas localizadas del Parque de Sierra Mágina, donde según confirman los propios establecimientos, hace días ya que las reservas para el fin de semana que viene estaban vendidas.

“La Semana Santa se ha consolidado ya como un producto turístico de los principales de la provincia y esperamos al menso un 5% más de visitantes y de ocupación hotelera respecto al pasado año 2016”, manifestaba a esta redacción a mediados de esta semana José Ayala, presidente provincial del gremio de alojamientos en Jaén.

Pese a ese crecimiento que se espera, Jaén sigue estando a la cola de las provincias andaluzas dentro de las previsiones realizadas por el propio sector, concretamente más de 7 puntos por debajo de la capital del turismo de sol y playa, Málaga, que registrará una media del 90,3% en los días claves de la celebración.

Sondeo

Según el sondeo realizado por la Junta de Andalucía entre el propio sector y conocido esta semana, los establecimientos hoteleros de Andalucía prevén alcanzar un grado de ocupación del 76,3% durante esta Semana Santa, llegando al 87,2% en el periodo principal de esta festividad, del Jueves Santo al Sábado de Gloria, porcentajes en ambos casos superiores a los registrados en el pasado ejercicio.

De confirmarse las expectativas de los hoteles, se superarán los resultados contabilizados en la Semana Santa del pasado ejercicio, cuando el grado de ocupación fue del 71,9% y del 85% en los días principales. No obstante, en este análisis debe tenerse en cuenta que en 2016 esta festividad cayó íntegramente en marzo y que las condiciones meteorológicas fueron inestables, lo que influyó en las reservas de última hora.

Por provincias, destacan las expectativas en Málaga, con un 81% de ocupación para toda la semana y un 90,3% para el periodo principal. Le siguen Sevilla (79,4% y 87,3%, respectivamente), Almería (75,4% y 84,6%), Cádiz (74,3% y 86,7%), Granada (74,3% y 85,6%), Córdoba (72,2% y 85,8%), Huelva (67,4% y 81,2%) y Jaén (58,2%o para toda la semana y 82,9% para los días principales).

Temporada alta

Según los datos manifestado por los diversos establecimientos consultados en ciudades como Úbeda y Baeza y zonas de los parques naturales de Cazorla y Mágina, las reservas a mediados de esta semana estaban a unos niveles más altos que en la Semana Santa de 2016. Así, lo confirmaba Luis Carlos García, responsable del hotel Palacio de los Salcedo en Baeza, cuyo nivel de reservas pasaba ya el 80% el pesado martes para toda la semana. En muchos de los casos consultados, aunque la venta de reservas se sitúa en el 80%, el 20% restante es retirado del mercado por el propio establecimiento en previsión de recibir clientes de última hora.

Ocurre también esa situación cuando en muchos de los establecimientos se exige una estancia media de tres días en la segunda fase de la festividad. García reconocía a esta redacción que “se está notando una cierta mejoría en términos generales. Sobre todo si tenemos en cuenta que para nosotros es temporada lata y eso eleva también los precios”.