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Jaén afronta otra campaña de ruina con apenas 215.000 Tm de aceite, un 19% más que el año pasado, según el aforo oficial de la consejería de Agricultura

Andalucía ronda las 550.000 toneladas, un 7,4% más que la anterior, pero un 46,5% menos respecto a la media de la última cinco campaña, mientras que el aceite de enlace andaluz  está en torno 232.000 toneladas. VIDEO Consejera.

 

Sin sorpresas. Tal y como el sector preveía, Andalucía y Jaén afrontan una segunda campaña consecutiva de ruina, según los datos del aforo oficial conocidos hoy que arrojan una producción aceitera de 550.000 toneladas en la comunidad autónoma, ligeramente superior (7,4%) que la pasada campaña 22/23 cuando registró 512.000 tm, pero un 46,5% menos sobre la media de las últimas cinco campañas. De cumplirse esos datos, estaríamos hablando de la tercera peor campaña de la historia en Andalucía, solo por detrás de la campaña 12/13 (477.000 tm) y la del año pasado 22/23 con las citadas 512.000 tm.

Respecto a Jaén, la provincia mayor productora del país y que aporta casi el 40% del caldo andaluz de esta campa, las estimaciones del aforo oficial son de producir 1.012.000 toneladas de aceituna de almazara, que con un rendimiento medio estimado del 21% arroja una producción de 215.000 toneladas de aceite. Se trata de un 19% más sobre las  179.864 tm y un 52,8% menos sobre la media de las últimas 5 campañas. Como ocurría en Andalucía, también para Jaén ésta sería al tercera peor campaña de sus historia tras la campaña 12/13 cuando registró 141.000 tm y la del año pasado 22/13 con 179.864 tm.

Respecto al empleo generado en el olivar y en la campaña aceitera, el aforo del olivar prevé que las labores ligadas a la producción de aceite de oliva generen 15,7 millones de jornales, de los que el 36% (5,7 millones) se corresponderían con las tareas de la recolección de aceituna. En la provincia de Jaén la estimación de jornales en conjunto son de 5,7 millones (un 38%) del total andaluz, y de esa cifra un 36%, unos 2 millones, sería el empleo generado en las tareas de la recolección de la aceituna la próxima campaña.

Los datos aforo

La consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, presentaba este primer aforo del olivar de Andalucía para 2023-2024, que registra la previsión de una leve subida del aceite de oliva respecto a la campaña anterior. En concreto, se espera recoger alrededor de 2,8 millones de tm de aceituna para molturar de las que, con un rendimiento estimado del 19,6% se obtendrían unas 550.600 toneladas de aceite de oliva.

Carmen Crespo apuntaba que se trata de una estimación “ligeramente superior en relación a la última campaña”, un 7,4% más  sobre las 512.400 tm de la pasada. La consejera se ha detenido también en el enlace de campaña con el que se espera contar para 2023-2024, concretando que se estima que la región podría contar con 232.745 toneladas de aceite de oliva, por lo que aseguraba que “Andalucía podría acercarse a las 800.000 toneladas de aceite de oliva (783.345 tm) sumando la producción estimada y el enlace de campaña”, ha comentado.

En su intervención, la responsable de Agricultura se ha referido al impacto de la “sequía pertinaz” que afecta a Andalucía y se ha convertido en “un problema estructural que está impactando en todos los sectores productivos”. Crespo ha concretado que el “déficit hídrico del 33% y las temperaturas superiores a la media” marcan esta campaña en la que, afortunadamente, algunas zonas de Andalucía han contado con lluvias en el mes de mayo que “han aliviado en parte la situación del olivar ayudando a la floración y al engorde de los frutos”.

Provincias

En cuanto a las provincias, la consejera ha resaltado el aumento de la producción de aceite de oliva que se espera en Jaén (+19,5%) hasta las 215.000 toneladas para 2023-2024, mientras que “la campaña anterior acabó con cerca de 180.000 toneladas”. Asimismo, Crespo ha remarcado la subida prevista en Almería, donde el volumen de aceite de oliva se podría elevar en un 19,9% en comparación con el año anterior y alcanzaría las 13.000 toneladas.

Carmen Crespo ha destacado el olivar como “motor de empleo” de la Comunidad Autónoma andaluza en general, y de la provincia de Jaén en concreto, ya que este territorio concentra el 38% del trabajo que se genera en Andalucía ligado a esta actividad. “Jaén es el epicentro del aceite de oliva del mundo”, ha recalcado, comentando que el sector olivarero es un “eje vertebral” de la economía andaluza, como demuestran los más de 2.860 millones de euros alcanzados en 2022.

La consejera ha recordado que “el 97% de los 800 pueblos de esta región cuentan con alguna superficie destinada al olivar”. Carmen Crespo ha apuntado “la economía y el empleo de más de 300 pueblos están ligados directamente a la producción de aceite de oliva” y que esta actividad que “tiene asociado un tejido agroindustrial fundamental con 1.700 empresas”. En concreto, en 2022-2023 estaban registradas alrededor de 770 almazaras y 162 entamadoras en Andalucía.

Empleo

Respecto al empleo, el aforo del olivar para la campaña 2023-2024 prevé que las labores ligadas a la producción de aceite de oliva generen 15,7 millones de jornales, de los que el 36% (5,7 millones) se corresponderían con la recolección de aceituna. En el caso de la aceituna de mesa, se espera que pueda generar alrededor de 1,8 millones de jornales en labores de campo en esta campaña, incluyendo la recolección.

En la provincia de Jaén la estimación de jornales en conjunto son de 5,7 millones (un 38%) del total andaluz, y de esa cifra un 36%, unos 2 millones, serían los dedicados a la recolección de la aceituna.

Por otro lado, la consejera se ha referido también al importante papel del olivar en “el desarrollo social y del mundo rurales de Andalucía, donde se refleja especialmente este aforo”; y también a su carácter internacional, ya que actualmente el aceite de oliva andaluz “llega a 129 países y se están abriendo nuevos mercados como Indonesia o Malasia”. Actualmente, Italia, Estados Unidos y Portugal son los principales mercados extranjeros del aceite de oliva de Andalucía.

Producción ecológica

El aforo de la Consejería de Agricultura se detiene también en la estimación de producción de aceite de oliva ecológico, que se prevé que alcance las 14.200 toneladas esta campaña. Este dato supone, como ha resaltado Carmen Crespo, un “ligero aumento” del 0,7% respecto a 2022-2023 hasta las 14.200 toneladas. La provincia de Córdoba destaca especialmente en esta actividad ecológica al concentrar casi el 40 % del total de Andalucía previsto para esta campaña (unas 5.600 toneladas).

Por otro lado, el estudio del Gobierno andaluz recoge también previsiones relativas a la aceituna de mesa.

En este caso, el aforo de 2023-2024 apunta a una producción de 300.136 toneladas y destaca la provincia de Sevilla, donde se espera alcanzar las 210.000 toneladas.

El estudio realizado por el Gobierno andaluz es un aforo realista elaborado en base a una metodología consolidada que, entre otras cuestiones, se apoya en diversas fuentes de información para poder conocer con fiabilidad la realidad del sector. De hecho, a pesar de tratarse de una estimación realizada semanas antes del inicio de la recolección de las aceitunas, las previsiones suelen ajustarse bastante a la producción real que finalmente se obtiene en la región. En cualquier caso, es conveniente recordad, como ha apuntado la consejera, que las previsiones podrían variar por factores externos como la climatología de las próximas semanas, “como bien saben los agricultores”.

Apoyo a los productores

En su discurso, Carmen Crespo ha apostado por “seguir esforzándonos por ganar posibilidades hídricas para hacer frente a la sequía” y continuar trabajando en la flexibilización del Plan Estratégico de la Política Agraria Común (Pepac) que ofrezcan respaldo a los profesionales del campo. Entre otras cuestiones, la consejera se ha referido a la posibilidad de que se prorrogue la reducción de las cubiertas vegetales para el olivar, de cuatro a dos meses; que “la agricultura ecológica sea un ecoesquema ‘per se’”; que en la condicionalidad se contemplen las labores a favor de pendiente y las labores superficiales que se llevan a cabo a partir de primavera “para conservar la humedad”.